La mujer ha asumido siempre una carga desproporcionada en la anticoncepción, el control de la natalidad ha sido y sigue siendo una tarea eminentemente femenina.
Los métodos anticonceptivos masculinos se limitan al condón y la esterilización (vasectomía), y para que el hombre se responsabilice y participe en este proceso, en primer lugar, es necesario un cambio en los estereotipos y un enfoque distinto en relación a la salud reproductiva. ¿El hombre va a estar dispuesto a adoptar un método que afecte a su propio organismo como ocurre con la píldora femenina?
Lo cierto es que se siguen realizando investigaciones para hallar un anticonceptivo masculino efectivo, seguro, reversible, con pocos efectos secundarios y que no disminuya la líbido; y parece que hay ensayos clínicos con resultados prometedores completados y probados con éxito en hombres sanos.
Hasta ahora se ha intentado pero precisa más investigación:
- Inyección hormonal de testosterona para suprimir la formación natural de espermatozoides (azoospermia)
- Píldora anticonceptiva oral. Combinación de testosterona ( inyección) y progestina (oral)
- Geles tópicos
- Inyección de sustancias químicas en el conducto deferente (no hormonales), para bloquearlo, en lugar de cortarlo como se hace en la vasectomía.
Solicita consulta en Clínica Buenavista para valoración urológica del problema.