EN CLÍNICA BUENAVISTA, después de más de 30 años de experiencia, sabemos que tomar la decisión de interrumpir o no un embarazo es difícil, implica un estrés emocional y es “normal” que esta decisión vaya acompañada de contradicciones y ambivalencia en muchos casos.
También sabemos: que cada mujer es única, que después de un aborto, las reacciones son diversas, pero que en la mayoría de los casos, el estrés es previo y durante el proceso de IVE y que, casi todas las mujeres, refieren experimentar sensación de alivio profundo después de un aborto por decisión propia.
Por nuestra experiencia de años (desde 1987 en Asturias) y la de muchos profesionales que trabajamos con mujeres que deciden interrumpir su embarazo (ACAI), podemos decir, que los sentimientos negativos como culpa, tristeza, arrepentimiento, confusión o pérdida suelen ser “normales” y fugaces, sólo en algunos casos excepcionales, las mujeres que han pasado por esta situación estresante, necesitan ayuda de un/a profesional para enfrentarse a esos sentimientos.
Sabemos que es importante el apoyo de amigos, familia y pareja cuando la hay, pero a veces sólo puede ser una decisión personal e íntima.
Sabemos que la mujer que se encuentra en esta situación de vulnerabilidad tiene que ser tratada con respeto y comprensión porque una atención adecuada disminuye el riesgo de problemas físicos y emocionales post IVE.
Es decisivo el apoyo y la información clara e imparcial de los/as profesionales de la IVE para que la mujer pueda tomar la decisión de abortar o no, dentro del marco legal, libre de inducción, coerción y discriminación (criterios de la OMS).
SOMOS PROFESIONALES competentes y sensibles de la Salud Sexual y Reproductiva y expertos en la interrupción del embarazo, garantizamos el cumplimiento de esta Ley a través de la mejora continua de todos nuestros servicios y reconocemos, desde siempre, el derecho a la interrupción del embarazo y el derecho a una maternidad libre y voluntariamente elegida.
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