El País

Tres de cada 10 mujeres de entre 18 y 25 años se hallan infectadas por el virus del papiloma humano (VPH), enfermedad de transmisión sexual que puede acabar provocando cáncer a largo plazo siempre que las afectadas no reciban ningún tipo de tratamiento.
Así lo concluye el primer estudio epidemiológico a gran escala realizado en España y que este miércoles presentó el Instituto Catalán de Oncología (ICO). El informe, realizado después de analizar a unas 3.200 mujeres de entre 18 y 65 años, ofrece la primera cifra fiable sobre el número de afectadas por el VPH en España: alrededor del 14% de mujeres, que en ocho de cada 10 casos padecen patologías con alto riesgo y potencialmente cancerígenas.

La media de edad de la primera relación sexual ha pasado de los 22,7 años a los 16,9 años

“Es un tipo de infección más frecuente de lo que podíamos pensar, especialmente entre mujeres jóvenes”, señaló el responsable del informe y jefe de la Unidad de Infecciones y Cáncer del ICO, Xavier Castellsagué. El virus del papiloma humano es la causa del cáncer de cuello de útero y se halla presente en el 80% de los tumores de ano y de vagina. También, en menor medida, en el de los de vulva, pene y faringe. El estudio determina que en España hay actualmente dos millones de mujeres infectadas por el VPH y considera que los hábitos sexuales, especialmente que las parejas comiencen a mantener relaciones sexuales de forma cada vez más precoz, contribuye a este incremento.

Esta circunstancia se refleja en la media de edad de la primera relación sexual, detalla el estudio. Esta pasa de los 22,7 años de edad en mujeres mayores (de entre 56 a 65 años) a los 16,9 años en mujeres jóvenes (de entre 18 a 25 años). La promiscuidad también es mayor en esta franja de edad, ya que el 45% han tenido más de dos parejas sexuales a lo largo de la vida mientras que entre las mujeres de más de 56 años el porcentaje cae hasta el 16%.

“Estos datos muestran la necesidad de vacunar a las niñas contra el virus del papiloma humano para prevenir cualquier posible efecto del papiloma, incluido el cáncer”, subrayó el responsable de investigación en cáncer del ICO, Xavier Bosch.

La vacuna del papiloma se está generalizando internacionalmente después de algunos casos controvertidos debido a reacciones adversas, detalló Castellsagué. En España, el Consejo Interterritorial de Salud aprobó en 2007 incluir la vacuna en el calendario para las niñas entre 11 y 14 años. Solo en este país se contabilizan 2.100 nuevos casos de este tipo de cáncer al año, con 740 muertes. Entre los años 2007 y 2008, se distribuyeron 1.146.000 dosis y se notificaron 103 casos adversos, 35 de ellos graves. En 2009, dos chicas de Valencia fueron ingresadas en la UCI tras recibir la vacuna, pero un comité de expertos determinó que las convulsiones sufridas se debían a un “síndrome de conversión fruto de la ansiedad”.